jueves, noviembre 18, 2004

Ex Libris

El que avisa no es traidor, he aquí la sección Sanchezdraguesca de este blog.


"Querido diario:

Esta semana me he leído cuatro libros. Para abrir boca empezaré con Die Legende vom heiligen Trinker**, una deliciosa fábula de Joseph Roth que nos narra la, a veces aventurada, a veces desagradable historia de un vagabundo borracho del París de los años 30 que debe devolver doscientos francos a Santa Teresa de Lisieux, que se los ha dado en préstamo por medio de uno de sus representantes católicos en la Tierra. Un libro muy entretenido y que se lee muy rápido que ahonda en la relación entre el vino y lo milagroso. Y además no tiene moraleja.







Después me leí A Madrid, por capricho de la escritora posmoderna Francisca "Fanny" Rubio. Fanny actualiza la vetusta novela de viajes en la que se cambian los antiguos galeones, zepelines, globos, y los parajes exóticos de grandes selvas, inmensas estepas heladas y culturas indígenas prehistóricas por algo tan prosaico como un viaje en RENFE desde Granada hasta Madrid. La protagonista, inspirándose en el evocador paisaje manchego, se dedica a darle la brasa a sus compañeros de compartimento contándoles la historia de su vida a base de monólogos, desde cómo fue su infancia hasta (cómo no) cómo tuvo que separarse del verdadero amor de su vida, un anarquista que hubo de exiliarse por aquella catástrofe histórica que fue la Guerra Civil. La pregunta es: ¿Se puede escribir una novela en este país en la que no aparezca la guerra civil de por medio? Aun así, y reconociendo que me exasperan per se las novelas guerracivilejcas no por el tema en sí, sino por la continuha falta de imaginación que emplean una y otra y otra vez los Padres de la Cultura Hispánica, si intento ser objetivo he de decir que la novela está cargada de lirismo, bien escrita, y que Francisca Rubio ha desarrollado bien un personaje de casi ochenta años.





El toque de auténtico aspirante a filólogo se lo da a esta lista el Pero... ¿hubo alguna vez once mil vírgenes? de Enrique Jardiel Poncela. Reconozco que tomé muchas precauciones ante este libro, pero me ha sorprendido gratamente: aunque en general es bastante flojo, hay algunos capítulos verdaderamente originales y que han conservado su frescor; y creo que sólo por ellos merece la pena la lectura de este libro. Aunque cuantitativamente parece fácil que algunas páginas de este libro sean buenas, ya que consta de unas quinientas cincuenta. Jardiel nos cuenta la historia de Pedro de Valdivia, un Don Juan que ha conquistado más de 36.700 mujeres, que se encuentra con la horma de su zapato, Vivola Adamant, que a su vez ha pasado por los lechos de más de 37.000 hombres.





Y de postre, The Restoration of Arnold Middleton** de David Storey; una obra de teatro escrita para ser leída que sigue los pasos del Teatro del Absurdo beckettiano. Cuenta la situación de un profesor de escuela completamente amoral, que persigue a sus alumnas y gasta todo su sueldo en armaduras medievales , de su neurótica mujer, que cree estar casada con un dios, y de la madre de ésta, una sesentona por la que el profesor siente una cierta atracción que termina en adulterio. No está mal.





Y esto ha sido todo. Un placer hablar contigo, querido diario."



** Que sepáis que siempre pondré los títulos de los libros de escritores extranjeros en su lengua original (hay que hacer todo lo posible por aparentar ser cool). Los que quieran saber cuál es su título traducido, no me queda otra opción más que señalar el enlace con el que seguro todos habéis jugado alguna vez.





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